Según la wikipedia, el doppelgänger es "el doble fantasmagórico de una persona viva". No pude comprobar (aquella tarde de jueves) si mi doble estaba vivo o era un fantasma. Apenas nos vimos unos segundos y creo que los dos nos asustamos. Yo estaba curioseando y mirando algo para una "excursión" en la agencia de viajes del FNAC (cuando había agencia de viajes, que ahora es el servicio postventa). Hacía cola y estaba de pie. Miré sin mirar (como siempre que hago cola) y pude ver a Yo quietecito y subiendo por la escalera mecánica. Yo se giró y me miró. Creo que abrió la boca por que Yo también la abrí y nos miramos como una pareja que se despide en la estación de tren (uno quieto y el otro moviéndose sin querer moverse). Yo estaba más rellenito, eso sí que es verdad, pero sin duda era Yo. Nos dió miedo perseguirnos por que ninguno de los dos movió un dedo. Creo que me molestó estar repetido. Uno esforzándose tanto por ser uno y resulta que es dos. Tanto que me ha costado reconocerme y diferenciarme de lo que me rodea (cogiendo un poquito de aquí y un poquito de allá) y resulta que realmente no hacía tanta falta.
La wiki también dice que encontrarte con tu doppelgänger es un augurio de mala suerte, o de muerte o de vaya usted a saber que cosa mala. Bueno, a ver, cosas malas si que me han pasado desde entonces, pero también buenas y todavía no me he muerto (lagarto, lagarto) así que no sé muy bien que efecto produjo (produje) Yo en Yo y Yo en Yo. Por que ahora que lo pienso Yo podría ser el doble fantasmagórico de Yo. Tal vez Yo fuera el mal presagio o el mal augurio y maté a Yo (o le avisé de su muerte o de la muerte de su buena suerte) sin ser consciente de ello.
Recuerdo (por que entonces no tenía ni idea de todo esto del doppelgänger), que estuve pensando sobre mi gemelo del que me separaron (subrepticiamente y para vete a saber que clase de experimento genético, secta satánica o millonario estéril) en la maternidad de la Vall d'Hebron. También pensé en un posible "desliz" o familia paralela de papá, que siempre trabajaba mucho y la casa "se le caía encima" (aún se le cae, pero no creo que le pille nunca dentro). Descarté que fuera mi gemelo inverso (especular) que vive en Australia, por que es metafísico y por que es imposible que nos encontremos nunca sin que estalle en Universo. Divad debe ser muy rico y debe estar pasando una mala época, pero oye, ya le tocaba.
Esto me recuerda a que un día en el trabajo estuve media mañana preguntándome qué había detrás de-la-puerta-que-no-da-a-ningún-sitio. Es una puerta grande, con espejos y está al final del pasillo de contabilidad (al lado de donde tiene el despachito el imbécil, para más señas). Al Hermano Contador y a mi nos hizo mucha gracia y estuvimos tirando de ese hilo un buen rato, hasta que llegó la Madre Superiora y nos dijo que daba al almacén de Pronovias. No la creímos por que su teoría era más improbable y bizarra que la nuestra (que iba de mundos especulares y universos paralelos).
La verdad es que da un poco de yuyu saber qué hay "detrás del espejo", por que una cosa es imaginarlo y otra cosa es atraversarlo (sin proponértelo) y encontrarte contigo en unas escaleras mecánicas del FNAC. Sea como sea, ese espejo debe ser ligeramente convexo... por que... Yo te vi un poco más rellenito... Tigre!
Mi yo apareció en una foto, detrás de mí, a lo lejos, en Budapest... Qué cosa.
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