martes, 9 de junio de 2009

Simas


Digamos que uno tiene... 13 años, por un poner. Digamos que, como protoadolescente es tan imbécil (es un suponer y las hormonas hacen mucho) como el que más. Digamos también que se va al Carrefour y tentado ante el CD de moda (ése que tanto le gusta a la chica-imposible) un escalofrío recorre su cuerpo. No tiene dinero (la paga no le llega), pero tiene que conseguir ese CD. Está convencido de que la chica quedará impresionada ante hazaña tan temeraria. Supongamos ahora que abre, sudoroso y con palpitaciones, su chaqueta (esa de imitación que le compró su madre) y con mano temblorosa coge el CD. Lo mira con atención. Pero no lo mira. Lo que hace es comprobar con el rabillo del ojo, que nadie le está observando. Sabe que tiene que ser rápido, sabe que tiene que arriesgarse y sabe que sólo tendrá una oportunidad si no quiere levantar sospechas. Mete la barriga para dentro y se dispone a encajar la rígida caja de plástico (con todas esas aristas) en sus partes más nobles y menos usadas (por otros). La maniobra es veloz, el gesto perfecto, la habilidad, de un prestidigitador. Sonríe, lo ha conseguido. Bien. Ahora ocurre algo, un imprevisto, un accidente y a velocidad de vértigo: La chaqueta no cierra, el botón del pantalón sale disparado, la cremallera se abre, los pantalones (un par de tallas más grandes) caen a plomo, casi como la caja del CD, pero más silenciosos, por que la caja al caer se rompe y al CD le da por rodar sobre su perfil milimétrico justo cuando el guardia de seguridad dobla la esquina y aparece frente a él. 
¿Veis el agujero que se abre en el suelo? ¿Sois capaces de ver la sima justo debajo de sus pies?
Pues eso. 

4 comentarios:

  1. Pobrecito. La pregunta es ¿escarmentará a tan temprana edad sobre lo inútil que resulta ser un romántico? otr@s nos tiramos hasta los treinta y tantos y ná de ná.

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  2. ...muy gráfico, ahora ya me queda clarísimo que es una sima ;)

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  3. Me temo Niñapí... que nop. Las cosas útiles no enseñan nada... están limitadas en sí mismas, están de-fin-idas (es decir, muertas). Sin embargo las cosas inútiles... pueden ser tantas otras cosas... (¿ves como no ha escarmentado???) :P

    :) Bienvenida Mividasinmi!, estás en tu hoyo.

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